Consideraciones humanas sobre cuestiones inútiles, innecesarias e imperfectas de la profesión atea. Compartir lo efímero, testimoniar lo disoluto, aullar ante el silencio. Aulla! Aulla!

6/24/2014

¿PODREMOS O PUDIMOS?


A la vista de los resultados de las últimas elecciones al parlamento europeo en nuestro país y sin entrar en muchos pormenores al respecto me interesa resaltar lo paradójico de esos resultados si fueran extrapolados a las próximas elecciones municipales. Curiosamente todos los análisis que he leído en estas últimas semanas se centran en proyecciones a unas futuribles elecciones generales con resultados espectaculares. Incluso desde los líderes de el incipiente “Podemos” se apunta en su discurso sus aspiraciones al “gobierno de la nación”, no teniendo en cuenta que el Ebro pasa por Zaragoza antes de desaguar en el mar mediterráneo.

Si ya fue un error de concepto -claro que fue un acierto para quienes así lo propusieron e impusieron en los medios de confusión y domesticación- considerar el 15 M como un movimiento, ahora podemos/puede caer en el mismo error, considerándose como tal un movimiento que se formaliza en partido político con aspiraciones de gobierno. Pero no hay que confundir “movimiento” con “movilización”, como tampoco conviene hacerlo entre“gobierno” con “poder”.

Si hoy existen en todo el estado aproximadamente 400 círculos en torno a “Podemos” ¿qué porcentaje real de población participa activamente, está movilizada, en este proyecto político “abierto”?. Sin duda lo consideraríamos alto en relación al vacío existente previamente, pero bajo en relación a lo deseable. Es cierto que ha sido rota una inercia y que la importante energía necesaria para despegar y vencer la fuerza que ejerce la gravedad del inmovilismo ha podido acumularse y detonar por convergencia en la candidatura de “Podemos”. Pero puede ocurrir que ahora en esa candidatura se crea que con ese impulso inicial hay fuerza suficiente para llegar a su objetivo con la propia inercia de ese despegue y la fuerza de atracción de masas que pueda esta procurar. Craso error si así se considera.

Ya fue, desde mi punto de vista, un error No confluir, con anterioridad a las propias elecciones, en una única plataforma que aglutinara al mayor número de iniciativas similares. El resultado hubiera sido mucho mejor y lo que es más importante la energía disponible a posteriori, por la confluencia de la propia movilización, mucho más alta y por ello posiblemente más eficiente al concentrarse.

Por ello, y al no haberse realizado esa confluencia, ésta aparece ahora no solo como necesaria sino como algo pendiente y, si entonces no se realizó entre otros motivos por aquello del credo en las propias expectativas electorales, hoy no se camina en esa dirección por mor de la desconfianza, algo tan nuestro, y por aquello de confundir confluencia y vasallaje por la posible “perdida” de propia identidad que se origina en toda confluencia, en todo mestizaje. Como si cada uno de estos pequeños grupos políticos tuviera una “identidad” diferenciadora, como la tiene una especie de otra en el mundo animal.

Afortunadamente hubo quien teniendo verdadera identidad -por la acción y no por omisión- no se prestó al juego del mercado político europeo, presuponiendo con acierto que fuera cual fuera el resultado, para unos o para otros, nada se podrá conseguir si lo que no se amplia y en donde se pone el foco para invertir la energía de que se dispone no es en lo Local. Porque donde reside la materia que alimente una deseable transformación democrática del ejercicio del poder es en los municipios, grandes, medianos y pequeños. Pues es ahí en donde se ha nutrido el desfalco y el expolio que nos ha traído hasta aquí y que sostiene todo este emporio.

En este contexto, NO entiendo como desde que terminaron esas elecciones desde todos los pequeños partidos con programas similares no han comenzado los acercamientos hacia una única plataforma. NO entiendo como desde “Podemos” aún no ha aparecido en su discurso un llamamiento público constante y reiterado en cada acto, en cada aparición televisiva de sus “lideres”, para que se movilicen las personas en todos los Ayuntamientos y barrios de este país en la creación de “Círculos” y “Plataformas Locales” que comiencen a trabajar para constituirse en Candidaturas para las próximas elecciones municipales. Porque será ahí en esas elecciones en donde se confirmen las expectativas, en donde se empiece a restar poder real a la oligarquía política de este país, en donde se comience a practicar la democracia directa y el control social sobre el ejercicio de la gestión política de lo publico. NO entiendo como desde los Círculos ya creados no se están convocando reuniones con los colectivos sociales que ya están funcionando mejor o peor en cada localidad y que no viven de subvenciones clientelares del entramado político al uso. NO entiendo como se discrimina a otras personas singulares o colectivos sociales desde la identificación previa de esta movilización como de “izquierda” o en banderas partidistas o ideológicas al uso, que excluyen en vez de agrupar. No entiendo como se discute la organización de una estructura política cuando no se impulsa previa y prioritariamente su extensión social en todos los pueblos y barrios. No entiendo a qué tipo de gobierno se quiere aspirar sin tener previamente un efectivo y real poder popular local.

¿Estarán dejando correr al galgo tras una liebre de plástico?.

1 comentario:

Manolo Bordallo dijo...

¡Hombre es que hay que actuar en todos los frentes! Tienen que organizarse, que están en ello; tienen que pertrecharse de ideología y política concreta; sacar líderes de donde los haya; disponer de medios para llegar a los Medios; aclarar el programa y las prioridades; todo eso antes de liarse la manta la cabeza y empezar a unir voluntades; y que otros grupos quieran unir voluntades...; en fin, el poder municipal la ley española está hecha de manera que no sea tal poder: Hay que empezar por ahí pero a la vez tirar políticamente a la cabeza, que es donde duele...